- Tipología
- Deportivo
- Ubicación
- Madrid
- Fecha
- 2018
- Tamaño
- 3.500 m2
- Estado
- Proyecto
Info
Se trata de un proyecto para el desarrollo de un nuevo gimnasio de grandes dimensiones, situado dentro de un recinto deportivo en un entorno natural privilegiado en Madrid.
La estrategia desarrollada trata de integrar en el entorno natural y construido circundante, una nueva estructura seriada versátil que se extiende en planta para albergar en su interior el nuevo programa deportivo requerido.
Dicha estructura se adapta sutilmente a las construcciones preexistentes de uso deportivo, cuyo programa se integra en su interior, y se abre a la naturaleza aprovechando las vistas del paisaje para incorporarlas en la propuesta. Fomentando su conexión con los usuarios y proporcionando un plus para el disfrute durante la práctica deportiva.
La volumetría y ubicación de esta nueva pieza es el resultado de un detallado estudio del soleamiento, que asegura la máxima optimización de la luz solar natural, minimizando el impacto de las sombras proyectadas por los edificios existentes adyacentes, que se integran mediante algunos vacíos donde se aprovecha para albergar algunas prácticas deportivas que se realizan al aire libre. La nueva cubierta deportiva genera una estructura a base de grandes lucernarios contrapeados orientados hacia el norte, que permiten la entrada abundante de luz natural, protegiéndose del exceso de radiación solar directa sin producir deslumbramientos y generando una luz homogénea en todas las salas. A su vez estos grandes lucernarios son utilizados como elementos disipadores del calor generado por el propio uso del gimnasio, facilitando la ventilación natural y la disipación del aire sobrecalentado generado por el desarrollo de las distintas actividades deportivas a través de ellos. Priorizando mediante el diseño la mejora de la calidad del aire interior de forma natural y la reducción de la demanda energética de los sistemas de iluminación y climatización artificial.
En el extremo sur del edificio, se proyecta un muro Trombe que actúa como un colector térmico que capta y almacena el calor del sol durante el día, liberándolo gradualmente durante la noche en los meses infra calentados. A su vez un pozo canadiense permite reducir el salto de temperatura y contribuye a la reducción de consumo energético de climatización.
El resultado es un proyecto eficiente y respetuoso con el entorno natural privilegiado donde se ubica, en el que convergen diseño, estructura e infraestructura.